– Tengo una idea buenísima para el capítulo de una serie…
– ¿Sí? ¿De qué va?
– De un guionista español que es autónomo. Al tío le llaman de un par de productoras porque quieren contratarle, por obra y para trabajos puntuales, claro, nada de incorporarlo a plantilla que estamos en crisis, y le preguntan cuánto desea cobrar…
– ¿Y…?
– Imagínate. El tío no sabe qué decir. No conoce los precios que se están pagando, no tiene un comité de empresa que le defienda, nada… Tiene miedo de pedir mucho y que entonces no le fichen; o demasiado poco y que crean que se está regalando porque no se valora lo suficiente. Entonces alguien le avisa que los guionistas tienen un sindicato* donde recomiendan más o menos cuánto sería hoy en día un pago digno según el tipo de trabajo que se trate.
– ¿Y ya está? ¿Eso es todo? No tiene mucha chicha, sinceramente.
– No. Ahora viene lo bueno. Porque el tío en realidad no era guionista ni es nada. Era un espía del Gobierno, que le abre un expediente al sindicato, acusándolo de violar las normas de la competencia por hacer ese tipo de recomendaciones, y la Comisión Nacional de Competencia (CNC) acaba metiéndoles una multa de 29.700 €.
– Mmmm… Esto se pone bueno. Y el sindicato se defiende, claro.
– Por supuesto, dice que a los colegios profesionales de abogados o notarios, que hacen lo mismo y recomiendan tarifas, nunca se les ha recriminado nada. Pero la CNC dice que nones, que menos recomendar y más pagar. Y así, el sindicato no puede actuar, los guionistas no saben cuánto pedir por su trabajo, ¿y quiénes ganan? Las productoras, por supuesto, que pueden ofrecer lo que les plazca sin que haya ninguna pauta de la que cogerse.
– Bueno, para ser ficción no está mal…
– ¿Ficción? ¿Y quién te ha dicho que es ficción?
* El sindicato se llama ALMA y tiene su sede en Madrid, la multa y las razones alegadas son reales. Las consecuencias también. El guionista/espía sí es un personaje de ficción, y cualquier parecido con la realidad no es pura coincidencia.
Lo peor de todo es que el CNC no aparece nunca cuando a un guionista no le pagan por el trabajo realizado, o peor, cuando a un guionista le chantajean con «no te pagamos este capítulo, pero nos comprometemos a llamarte para la próxima temporada». Esto ocurre. Ahí Competencia no tiene nada que decir, parece ser. Todo bien.