No sería justo juzgar a una ciudad (o a un par en este caso) solo por ver cada día las portadas de sus periódicos, pero no deja de ser llamativa la permanente presencia de temas policiales en los diarios de Ceuta y Melilla. Puedo asegurar que al menos tres o cuatro veces a la semana, ya sea por operaciones realizadas, declaraciones de sus jefes o simples actos internos, la Guardia Civil, la Policía Nacional e incluso la Legión ocupan espacios destacados en las aperturas de estos matutinos, y siempre con una mirada complaciente, agradecida y positiva. La de hoy de El Faro de Melilla es apenas un ejemplo, pero podría elegir cualquiera en cualquier otro día.

La sensación que se tiene desde fuera es la de «zonas militarizadas», al mejor estilo de esos territorios fronterizos de los que acostumbran a enseñar las películas rodadas en Tijuana o El Paso; o las documentales que enseñan Ciudad del Este, en Paraguay, o cualquier sitio semejante. Lugares donde la Ley se impone con mano dura, porque su fragilidad es extrema. Y resulta que dos de ellos los tenemos aquí, en esta España tan europea…

¡Que llamen urgente a Tarantino!