Jorge Bergoglio, argentino, 77 años, es el nuevo Papa de la Iglesia Católica. Stop. El primer sudamericano en ocupar el trono de San Pedro. Stop. Es el representante de un Episcopado que jamás se caracterizó por su progresismo. Stop. Que en su día apoyó y encubrió los crímenes de la Dictadura de Videla y compañía. Stop. Un Episcopado homófobo y clasista, que si en los últimos años ha vertido críticas sobre las injusticias sociales lo hizo más desde una posición política que realmente cristiana. Stop. El catolicismo estrena jefe, pero en el fondo, lo único que cambia es el continente y el idioma. Bueno, y que al nuevo Pontífice seguramente le gustará el asado.
Se sabe si es de Independiente??
Quería decir: ¿Se sabe si es (de) Independiente?
Faltan datos Rodolfo. No caiga en el facilismo, y lo que la gilada quiere escuchar. Defraudado.
Datos abundan: su posición contraria al matrimonio homosexual, la histórica postura clasista de la Iglesia argentina, siempre al lado de los poderosos, de los oligarcas, siempre en contra de los sectores más progresistas de la propia Iglesia, siempre entre las más retrógradas de Sudamérica… Y por supuesto, el imperdonable papel -de la Iglesia y de Bergoglio- durante la Dictadura. Datos hay para regalar, pero no entran en un telegrama.
Y por supuesto, me es indiferente lo que quiere escuchar la gilada. Digo lo que me parece, sin pretender que le guste siempre a todo el mundo.
No Antonio, el nuevo Papa, como es lógico, es de San Lorenzo… Y en cuanto a su independencia, me remito al comentario anterior.